Conexiones Divinas

A lo largo de nuestra vida van a llegar muchísimas personas y de la misma manera muchas de ellas van a salir, ya sea porque nos movemos geográficamente de lugar, o porque sencillamente nuestro tiempo de comunión con esas personas llega a su fin. De cualquier manera, constantemente estamos haciendo conexiones con las personas, pero no todas esas conexiones serán de provecho a nuestra vida; si no solamente las Conexiones Divinas, que son aquellas que específicamente fueron enviadas de parte de Dios para Edificar y Bendecir nuestra vida.

Mis 2 hijas adolescentes están en edad escolar y suelen hablarme de sus “amigas” y como madre procuro siempre ser honesta con ellas y enseñarles que aunque es bueno enfocarnos en las cosas buenas de las personas y esperar lo bueno de ellos, no podemos dejar de considerar el hecho de que muchas veces las personas no van a actuar de la misma manera en que nosotros actuamos con ellos y que todos nos equivocamos, pero qué muchas veces esos errores dejan al descubierto las verdaderas intenciones que hay en el corazón. Aunque tal vez suene un poco drástico siendo que su vida escolar va a terminar en cierto momento, siempre les he dicho que esas “amistades” son pasajeras y que muy probablemente el 100% de esas conexiones, no permanecerán en sus vidas adultas; por lo tanto no son personas con las que ellas puedan contar de una manera absoluta.  De la misma manera sucede con todos nosotros en nuestra vida adulta, habrá temporadas en las que algunas personas serán parte de nuestra vida, y quizá una parte muy importante; serán personas que nos van a bendecir con conocimiento, alegría, compañía y muchas cosas, que harán que nuestra vida sea más plena. Pero como sucede con las amiguitas de la escuela de mis hijas, tendrán un tiempo limitado en nuestra vida. Seguro que sí te pregunto cuántas de ustedes siguen siendo mejores amigas con tu mejor amiga de la secundaria, muy pocas dirían yo.  

Pero hay ciertas personas qué de repente aparecen en nuestra vida, generalmente de manera imprevista, que llegan a mejorar nuestra calidad de vida, y que aunque quizá no nos hayan conocido por mucho tiempo, pareciera que les conocemos desde siempre. Esta clase de personas o de encuentros es a lo que yo les llamo Conexiones Divinas.

Hace un par de años atrás, mientras Oraba con una hermana Dios me habló de  las conexiones Divinas que Él estaba enviando a mi vida para bendición y crecimiento; y más temprano que tarde empecé a verlas y a vivirlas. Desde entonces he procurado reconocer estas Conexiones Divinas en mi vida, para poner lo mejor de mi parte y poder aprovecharlas. 

Muchas veces van a llegar conexiones que parecen maravillosas y que se verán como caídas del Cielo, pero que en realidad no lo son, pero cómo saber sí lo son o no? Mi método muy sencillo: Proverbios 10:22: La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella. 

Así de simple, si esta conexión está edificando mi vida, me está haciendo crecer y a la vez me está llevando más cerca de Dios; definitivamente es un enviado del Señor; pero si sucede lo contrario, por muy maravillosa que sea esa conexión debe terminar. Por eso yo les digo a mis hijas que deben ser muy cuidadosas con a quiénes ellas llaman amigas, pero sobre todo con a quiénes ellas consideran amigas. 

Las Conexiones Divinas aunque a veces no estarán presentes toda la vida, sí permanecen latentes para toda la vida. Yo creo en siempre dejar las puertas abiertas en lo referente a las relaciones interpersonales, y con esto me refiero al hecho de nunca dejar cuentas pendientes con nadie o terminar enemistados con alguien; porque nunca sabemos si en el futuro esas personas se pueden convertir en una Conexión Divina para nuestra vida, pero por nuestra falta de prudencia cerramos la puerta para esa bendición. 

Hoy quiero Invitarte a reconocer esas Conexiones Divinas y darle gracias a Dios por ellas, pero también invitarte a que puedas bendecir a esas personas que han hecho tu vida mejor y te han hecho crecer; y aunque quizás algunas de esas conexiones no estarán presentes el resto de tu vida, seguramente que si un día tú necesitas volver a ellas estarán ahí para ti, pues las puertas que Dios abre nadie las puede cerrar (Isaías 22:22). Benditas Conexiones Divinas. 

Filemón 1:20 NVI Sí, hermano, ¡que reciba yo de ti algún beneficio en el Señor! Reconforta mi corazón en Cristo.

Tu turno! Cuéntanos: Tienes algún testimonio referente al tema que quieras compartir, Comparte! Cómo crees que podemos bendecir y fomentar las Conexiones Divinas? Escríbenos queremos Orar por ti; no estás sola y recuerda que Dios tiene mucho más para ti. pastora@mujeredifica.com

Has esta Oración: Amado Padre Celestial, Gracias porque tú siempre tienes cuidado de mí, tú sabes lo que yo necesito aún antes de abrir mis labios. Gracias porque tus planes para mí son Buenos y porque siempre me guías por la Senda de Justicia y Verdad, te doy Gracias Señor por esas Conexiones Divinas que has puesto en mi vida y aún por las que vendrán en el momento preciso. Gracias porque tu deseo es que yo crezca y sea bendecida, y en el camino tú me das las herramientas para poder hacerlo y también envías aquellos que me ayudarán alcanzar la estatura que tú quieres para mí. Ayúdame siempre a estar atenta y aprovechar las Conexiones Divinas. En el nombre de Jesús Gracias, Amén y Amén.

Pastora Susan Cruz, Casa de Oración Elohím Ministerios Ebenezer Sterling VA

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