Respira profundo y sigue Adelante
Respira y sigue caminando, esa es una de las frases que probablemente todos nosotros hemos utilizado en algún momento de nuestra vida; y es que sin importar la temporada que estemos viviendo siempre habrá momentos en los que sentimos que ya no hay fuerzas para continuar, que no vale la pena tanto esfuerzo, que nuestra carrera llegó al final. Pero en medio de esos momentos siempre viene un hálito de esperanza y ya sea que alguien más se acerque y nos anime o nosotras mismas tengamos que alentarnos, por la Gracia de Dios seguimos aquí.
Cuántas veces no hemos considerado la idea de rendirnos? Y es que la vida no es fácil, pero vale la pena vivir; la decepción, el cansancio, las dificultades; son parte de la vida, y son esas situaciones las que nos ayudan muchas veces a crecer, y nos enseñan a valorar y a ser agradecidos por todo lo que tenemos. Yo misma me he encontrado en situaciones en las que he estado a punto de rendirme pensando en que ya no tenía fuerzas para continuar. Y es que quién de nosotros es vulnerable al cansancio, al dolor o la frustración? Sin embargo, en mis momentos más oscuros es cuando la voz de Dios se ha escuchado más clara en mi vida, para nuevamente experimentar ese dicho popular que dice "Después de la tormenta viene la calma" Pero Dios hace que además de la calma venga también la recompensa; y después de mi último examen espiritual no solamente recibí mis calificaciones de aprobación, sino también los premios por haber permanecido. Quiero decirte que sea cual sea la situación que estes afrontando o que hayas afrontando, cuándo depositas tu confianza en Dios, Èl hará que al final del llanto vuelvas a sonreír. Todos vivimos diferentes procesos, todos somos probados de diferentes maneras, recuerdo hace muchos años a una hermana de la Iglesia que estaba soltera y qué se había guardado para Dios y su futuro esposo, pero que seguía esperando a sus 40 años por ese hombre por el que ella le había pedido a Dios. Muchas personas se burlaban de ella, muchas otras le animaban a desistir de su esperanza, y muchas otras se lamentaban de la desgracia de esta pobre mujer, cada año pedía la misma Oración: Señor dame mi esposo. Yo me imagino que esta mujer cada año se detenía, respiraba profundo y continuaba, y me imagino que probablemente en más de alguna ocasión ella quiso rendirse. Y recuerdo algunos comentarios de las otras mujeres adultas, porque en ese entonces yo era apenas un adolescente; que mostraban el hecho de que hasta a las mujeres de fe les faltó el valor para perseverar con esta mujer, pero ella no se rindió. Cuando Dios finalmente le contestó fue todo tan drástico y sorprendente, porque a los 41 años ella se había casado, a los 42 años se estaba moviendo de país, a los 43 se convirtió en madre por primera vez, y a los 45 finalmente ella era la señora de su casa en un país de primer mundo con una familia maravillosa. En un término de 5 años Dios hizo posible lo imposible, no me cabe duda que esos eran los planes que él tenía para ella; pero ella tuvo que esperar hasta los 40 años para empezar a verlos cumplirse. Se imagina usted si está mujer se hubiese dado por vencida a los 39 años? Seguramente su historia sería completamente diferente, gracias a Dios que ella cada año decidía perseverar. Como esta historia podría compartirles muchas otras, la primera que salta a mi cabeza es la de una mujer que esperó 10 años antes de poder finalmente convertirse en madre. Pero también recuerdo algunas historias de la Biblia, recuerdo un Naamán (2 Reyes 5) que tuvo que sumergirse 7 veces en las aguas de un río sucio antes de poder ser sano de su lepra, recuerdo también los amigos de un paralítico (Marcos 2) qué tuvieron que subirse al techo de una casa y hacer descender a su amigo a través del tejado dentro de la casa para poder ser sano, entre otras. Y es que cada uno de estos personajes tomó la decisión de continuar a pesar de los obstáculos, a pesar del cansancio, del dolor, la decepción, a pesar de ellos mismos; y este día la Palabra del Señor te alcanza para decirte: No te rindas, aún hay más, lo mejor está por venir pero es necesario continuar!
Estamos ya a dos meses de terminar el año, quizás no has recuperado aún todas las cosas que anhelabas recuperar este año, pero estoy segura de que no estás en el mismo lugar en el que estabas cuando empezaste el año; y como la historia que te contaba de aquella mujer qué esperó 40 años para recibir su petición, a ti y a mí también nos toca esperar; primero Dios no serán 40 años, puede que ya sea solamente estos dos meses o quizás un poco más, pero lo que sea que haga falta esperar vale la pena. Te ánimo a que no te rindas, ve lo que te ha costado llegar hasta aquí, mira las cosas maravillosas que Dios ha hecho en tu vida, No te rindas! Si estás cansada, si te sientes frustrada, detente un momento respira profundo y sigue adelante.
Salmos 16:8 NTV Sé que el Señor siempre está conmigo. No seré sacudido, porque él está aquí a mi lado.
Tu turno! Cuéntanos: Tienes palabras de Aliento para una amiga, compártelas! Te sientes desanimada y sin fuerzas para continuar? Escríbenos queremos Orar por ti; no estás sola y recuerda que Dios tiene mucho más para ti. pastora@mujeredifica.com
Has esta Oración: Amado Padre Gracias por estar siempre conmigo, Gracias porque hasta aquí me has ayudado y tu Fidelidad no cesa. Te pido Señor que renueves mis fuerzas para continuar, sabiendo que tus planes para mi son Buenos, y que pase lo que pase, vale la pena continuar. En el nombre de Jesús Gracias, Amén y Amén.
Pastora Susan Cruz, Casa de Oración Elohím Ministerios Ebenezer Sterling VA.