Cuando vienen los cambios

Hay un dicho que dice: “Más vale viejo conocido que nuevo por conocer” Y esta es una verdad por la que la mayoría de nosotros vivimos, el problema es que a veces lo nuevo por conocer es mucho mejor que lo viejo conocido pero como eso es algo que está fuera de nuestro entendimiento, preferimos no arriesgarnos y nos conformamos con lo que ya tenemos sin saber que si avanzamos por algo nuevo nos espera algo mejor.

Es normal que como seres humanos tengamos miedo a los cambios, hay algo dentro de nosotros que nos hace desconfiar de aquellas cosas que no sabemos, que no entendemos o conocemos; pero la verdad es que durante toda nuestra vida atravesamos una cascada de cambios que se generan uno tras otro, y muchas veces sin darnos cuenta; porque de no ser así, quizás todos nosotros seguiríamos en el vientre de nuestras madres, pero el cambio o la transición del nacimiento del vientre al mundo era necesario. Algunos cambios son parte necesaria de la vida, como el hecho de que un bebé tiene que aprender a caminar, a correr, a valerse por sí mismo; y quizás aunque estos cambios nos traigan una mixtura de sentimientos logramos aceptarlos porque entendemos que es el proceso normal de la vida. Pero muchas veces ocurren cosas en nuestra vida que no parecen tan “normales” y cuando esos cambios llegan es muy difícil aceptarlos, es más, en ocasiones hasta nos resistimos a ellos porque no sabemos o no entendemos que realmente son los Planes que Dios tiene para nuestra vida y son Buenos. Viene a mi mente una historia en La Biblia acerca del profeta Samuel, el rey Saúl y David (1 Samuel 9-16); Samuel ungió a Saúl como rey después que el pueblo lo había escogido e hizo muchas cosas por el pueblo sin embargo también pecó, a tal punto que Dios lo desecho como rey de Israel. Dice la Biblia qué Samuel lloro al apartarse de Saúl para no volverlo a ver, me imagino que Samuel debe haber pensado que ahora que el pueblo tenía un rey iban a estar mejor y siendo que el rey que había sido escogido entre el pueblo era a la vista de todos el hombre más indicado para dicha posición pues la Biblia dice que Saúl era el más alto de los hombres y era de hermoso parecer, era como diríamos en nuestros tiempos el número 1, y al este ser desechado delante de Dios Samuel seguro se preocupó pensando en que ahora el pueblo iba a quedarse sin rey o que el rey que escogieran no iba a ser tan apto como Saúl porque él era el número 1. Pero Dios reprendió a Samuel y le dijo que no llorará más por Saúl porque Él ya había escogido a otro para ser rey sobre Israel, otro que era mejor, más capaz, y más grato ante los ojos de Dios. Samuel no sabía los planes de Dios y tenía miedo, era un cambio bastante grande el que estaba sucediendo; y sin lugar a dudas era lo Mejor para Todo Israel ya que David no solamente era un hombre con un mejor corazón que el de Saúl, sino que además él había sido escogido por Dios y no por los hombres.

Muchas veces los cambios que vienen a nuestra vida nos van a producir duda, temor, desconfianza, tristeza, quizá hasta enojo; pero si estamos en la Voluntad de Dios y Confiamos en Él podemos estar seguros de que aún esos cambios van a ser Mejor para nuestra vida porque Dios ve más allá de lo que nosotros vemos y entendemos.

No le tengas miedo a los cambios, recuerda que la oruga para convertirse en mariposa tiene que cambiar por completo.

1 Samuel 16 Dijo Jehová a Samuel: ¿Hasta cuándo llorarás a Saúl, habiéndolo yo desechado para que no reine sobre Israel? Llena tu cuerno de aceite, y ven, te enviaré a Isaí de Belén, porque de sus hijos me he provisto de rey. 2 Y dijo Samuel: ¿Cómo iré? Si Saúl lo supiera, me mataría. Jehová respondió: Toma contigo una becerra de la vacada, y di: A ofrecer sacrificio a Jehová he venido. 3 Y llama a Isaí al sacrificio, y yo te enseñaré lo que has de hacer; y me ungirás al que yo te dijere. 4 Hizo, pues, Samuel como le dijo Jehová; y luego que él llegó a Belén, los ancianos de la ciudad salieron a recibirle con miedo, y dijeron: ¿Es pacífica tu venida? 5 El respondió: Sí, vengo a ofrecer sacrificio a Jehová; santificaos, y venid conmigo al sacrificio. Y santificando él a Isaí y a sus hijos, los llamó al sacrificio. 6 Y aconteció que cuando ellos vinieron, él vio a Eliab, y dijo: De cierto delante de Jehová está su ungido. 7 Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.

Tu turno! Cuéntanos: Como has enfrentado los cambios difícles en tu vida? Puedes darle un consejo a una amiga que le cuesta decidir por el cambio? Comparte un testimonio de como aceptar los cambios han mejorado tu vida. Si necesitas Oración o consejería escríbenos pastora@mujeredifica.com

Has esta Oración: Amado Padre Celestial, se que tu conoces mi camino, y que cada paso que doy está marcado delante de ti; Señor te pido que me ayudes a Confiar en ti, que aunque vengan cambios difíciles a mi vida pueda descansar en la Promesa que lo que Tu tienes para mi Siempre es lo mejor, Ayúdame a Confiar que aunque yo no sepa todo, aunque no entienda todo, Tu tienes el Control de mi vida y al final mientras esté en Tu Voluntad Todo Ayudará para Bien. En el Nombre de Jesús, Amén y Amén.

Pastora Susan Cruz, Casa de Oración Elohím Ministerios Ebenezer Sterling VA.

Previous
Previous

Me caí pero me vuelvo a levantar

Next
Next

Quién me Ama?